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¡Me ha dicho Mamá que no me quieres!

Escrito por de Carmen Serrano 15 Mayo 2013

 

Hace un par de meses se presentó el libro "¡Me ha dicho Mamá que no me quieres!" de la escritora Carmen Serrano.

Ésta comenzó su intervención apoyándose en una frase célebre de Martin Luther King, "No me duelen los actos de la gente mala, me duele la indiferencia de la gente buena", preámbulo a las emocionantes palabras que la propia Carmen Serrano hizo suyas para poner sobre la mesa la impasividad que ha mostrado hasta ahora la sociedad española en los conflictos de familia, sobre todo cuando hay niños testigos y protagonistas.

Carmen Serrano lanzó una dura crítica hacia las personas que realizan un "uso fraudulento de la Ley Integral de Protección a la Mujer" ya que permiten con ese uso malintencionado el convertir, una Ley de protección a la mujer en un arma arrojadiza contra el hombre, provocando una asimetría legal claramente inconstitucional según la autora, y que por otro lado tiene como efectos colaterales la indefensión de quien verdaderamente necesita ayuda por maltrato.

El libro es sin duda una obra comprometida, que hace una reflexión desde el más claro sentido común sobre los problemas actuales a los que se puede enfrentar un niño cuando sus padres dejan de ser padres para convertirse en simples progenitores. Al mismo tiempo, la Autora, pide la implicación y esfuerzo de las parejas con hijos, por encima de cualquier desavenencia que pueda haber entre ellos, para buscar soluciones mirando siempre por el interés de los niños. Los niños no son los culpables de nada, ni son psicólogos y sobre ellos no deben recaer injustificados efectos dañinos derivados de problemas y desavenencias entre sus padres.

Su mensaje está avalado por jueces y psicólogos, expertos en esta materia, pero por encima de todo, por personas que se han visto en esta misma situación. Carmen Serrano pretende lanzar una llamada de atención sobre situaciones en las que la ley está atada de pies y manos para poder actuar y ayudar a los más perjudicados que, muchas veces, resultan ser los menos amparados por dicha legislación.

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